El día 7 de junio se aprobó el “Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático del Perú”[1]. Representa un gran avance para el Perú ya que permite abordar esta problemática en el largo plazo y promover medidas para la adaptación al cambio climático, así como reducir la exposición y la vulnerabilidad del país. Considera un doble horizonte temporal, el año 2030 y 2050, como se menciona en el documento. Se resaltan los principales alcances de este documento.

En este sentido, el marco conceptual de trabajo estará enfocado en:

Reducir, prevenir y/o evitar los daños, pérdidas y/o alteraciones actuales y futuras generadas por los peligros asociados con el cambio climático. Por lo que, será necesario que se anticipe y reduzca los riesgos actuales y/o evitar la generación de riesgos futuros ante los efectos del cambio climático, para reducir o evitar los potenciales daños, pérdidas y alteraciones en los ecosistemas, cuencas, territorios, medios de vida, población, infraestructura, bienes y servicios, así como aprovechar las oportunidades que ofrece la adaptación al cambio climático para el desarrollo sostenible (MINAM, 2021).

Por otro lado, al 2030 este estará alineado con los objetivos de las contribuciones nacionales determinadas (NDC)[2] del Acuerdo de Paris, y, al 2050, los objetivos se plantean con miras a establecer un modelo de desarrollo resiliente en el tiempo. Las principales áreas temáticas que serán involucradas en el Plan son: i) el agua, ii) la salud, iii) los bosques, iv) pesca y acuicultura, v) agricultura y vi) otras.

De acuerdo con las áreas temáticas, las instancias a nivel nacional que tendrán la labor de liderar este plan son el Ministerio del Ambiente, Ministerio de Salud, Ministerio de Transporte y Comunicaciones, Ministerio de la Producción, Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, Ministerio de Energía y Minas, y Ministerio de Comercio Exterior y Turismo. Adicionalmente, sus acciones serán complementadas con los gobiernos regionales, provinciales y distritales, el sector privado y actores de la sociedad civil.

Respecto al marco metodológico, está enfocado en la gestión del riesgo ante los efectos del cambio climático. Dicho modelo presenta de forma simplificada la ruta general para la gestión del riesgo. Esta tiene cuatro fases, que están contenidas dentro de la ruta metodológica del NAP: i) El análisis de riesgos ante los efectos del cambio climático para cuantificar los riesgos y establecer un diagnóstico, ii) la formulación de estrategias en base al diagnóstico que comprenderán 92 medidas de adaptación priorizadas, iii) la implementación de las MACC[3], que deberá contar con las condiciones habilitantes y la alineación con las prioridades de políticas nacionales y subnacionales, incluyendo los enfoques transversales y iv) el monitoreo y evaluación de las medidas de adaptación. ( Figura 1).

Figura 1. Ruta metodológica del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático

En este sentido, es importante mencionar que el Plan de Adaptación al Cambio Climático representa un proyecto bastante ambicioso para el Perú, dado que es una estrategia pensada hacia el futuro; pero, es urgente abordar y ejecutar. Esperamos que estas acciones se consoliden en el horizonte temporal previsto, a fin de lograr tanto sus objetivos de mediano plazo como de largo plazo. Cabe mencionar que esta no es una política aislada, por lo que, es necesario también promover estrategias internacionales conjuntas tanto a nivel de países, como a través de organismos multilaterales como el Banco Mundial, BID y PNUD. Se trata de mitigar los impactos negativos de este fenómeno ambiental, y orientarse hacia un desarrollo sostenible e inclusivo.

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[1] A través de la Resolución Ministerial N°096-2021-MINAM. Disponible en: https://www.gob.pe/institucion/minam/normas-legales/1955977-096-2021-minam

[2] Por sus siglas en inglés se le conoce como National determined Contribution.

[3] Medidas de Adaptación al Cambio Climático